Literatura 1 – Cinema 0
En términos deportivos, se podría definir así la situación por la que atraviesa el cine y la literatura actualmente.
Este domingo por la mañana, cual Pepito Grillo en busca de su álbum de cromos, decidí ir a pasear por los encantes del Mercado de San Antonio. Una actividad que años atrás hacía prácticamente cada domingo. Allí compraba programas de mano, de cine. Press-boock de las películas, los fotogramas (lo que en inglés se llama Lobby Cards) que se exponían en los vestíbulos de los cines, carteles y fotos. Pues bien, este domingo comprobé, muy a mi pesar, que uno de mis proveedores ha dejado de tener los Lobby Cards, porque como ya no se exhiben en las multisalas, pues no se producen. Tampoco tiene Press-books. Se dedica exclusivamente a la venta de carteles, y entre estos los más vendidos son los de Bruce Lee (artes marciales) y los de Michael Jackson o de alguna serie de TV de éxito. ¡Lamentable! Los programas de mano, han pasado a ser una mercancía de las paradas de sellos, billetes y monedas (han dejado de ser un material cinematográfico). Sobreviven como pueden, dos pequeñas paradas que siguen queriendo vender sólo fotos de artistas y que según dicen están abocados a la ruina, ya que no interesa a nadie, comprar fotos de artistas de cine. Y por último, visité a Joan Vall, el que sigue manteniendo la tienda “Cinemascope”, en la calle Torrijos, entre los dos Verdi. En su parada de la esquina con Borrell y Tamarit ahora sólo tiene libros, novelas. Ha dejado el material de cine sólo para su tienda y ésta no sabe hasta cuando la tendrá abierta. Lo dicho: Literatura 1- Cine 0. Desde mi infancia es este mercado predominaban: los cromos (hoy siguen, pero salvo alguna película de la Disney, el resto es todo fútbol), material de cine, revistas y libros. Hoy el cine prácticamente ha desaparecido. Las revistas son pocas por no decir nulas. Se mantienen los tebeos (superhéroes y los antiguos de los años 40 y 50 a precios desorbitados). El libro se mantiene.
De regreso a casa he comprado El País como de costumbre y en la revista dominical leo un artículo sobre la bancarrota de la Metro Goldwyn Mayer. La famosa major del león está a punto de desaparecer, si alguien no paga los 3.500 millones de dólares que deben a sus acreedores. Lo dicho: Cinema 0 – Literatura 1. Tanto en el Mercado de San Antonio como en cualquier mercado. Parece ser que el cine no ha sabido adaptarse bien a las nuevas tecnologías y leyes de mercado. Esperemos que no siga por los mismos derroteros la literatura, con la entrada del libro electrónico.
Pepito Grillo regresó a casa sin su álbum de cromos.
En términos deportivos, se podría definir así la situación por la que atraviesa el cine y la literatura actualmente.
Este domingo por la mañana, cual Pepito Grillo en busca de su álbum de cromos, decidí ir a pasear por los encantes del Mercado de San Antonio. Una actividad que años atrás hacía prácticamente cada domingo. Allí compraba programas de mano, de cine. Press-boock de las películas, los fotogramas (lo que en inglés se llama Lobby Cards) que se exponían en los vestíbulos de los cines, carteles y fotos. Pues bien, este domingo comprobé, muy a mi pesar, que uno de mis proveedores ha dejado de tener los Lobby Cards, porque como ya no se exhiben en las multisalas, pues no se producen. Tampoco tiene Press-books. Se dedica exclusivamente a la venta de carteles, y entre estos los más vendidos son los de Bruce Lee (artes marciales) y los de Michael Jackson o de alguna serie de TV de éxito. ¡Lamentable! Los programas de mano, han pasado a ser una mercancía de las paradas de sellos, billetes y monedas (han dejado de ser un material cinematográfico). Sobreviven como pueden, dos pequeñas paradas que siguen queriendo vender sólo fotos de artistas y que según dicen están abocados a la ruina, ya que no interesa a nadie, comprar fotos de artistas de cine. Y por último, visité a Joan Vall, el que sigue manteniendo la tienda “Cinemascope”, en la calle Torrijos, entre los dos Verdi. En su parada de la esquina con Borrell y Tamarit ahora sólo tiene libros, novelas. Ha dejado el material de cine sólo para su tienda y ésta no sabe hasta cuando la tendrá abierta. Lo dicho: Literatura 1- Cine 0. Desde mi infancia es este mercado predominaban: los cromos (hoy siguen, pero salvo alguna película de la Disney, el resto es todo fútbol), material de cine, revistas y libros. Hoy el cine prácticamente ha desaparecido. Las revistas son pocas por no decir nulas. Se mantienen los tebeos (superhéroes y los antiguos de los años 40 y 50 a precios desorbitados). El libro se mantiene.
De regreso a casa he comprado El País como de costumbre y en la revista dominical leo un artículo sobre la bancarrota de la Metro Goldwyn Mayer. La famosa major del león está a punto de desaparecer, si alguien no paga los 3.500 millones de dólares que deben a sus acreedores. Lo dicho: Cinema 0 – Literatura 1. Tanto en el Mercado de San Antonio como en cualquier mercado. Parece ser que el cine no ha sabido adaptarse bien a las nuevas tecnologías y leyes de mercado. Esperemos que no siga por los mismos derroteros la literatura, con la entrada del libro electrónico.
Pepito Grillo regresó a casa sin su álbum de cromos.
Hola! Veig que has tornat "sano y salvo". Bien!
ResponEliminaRealment, per algú tan afeccionat com tu al cinema el panorama és decebedor.
Estaria bé que quan torni la Ma. Dolors (el 8) ens poguessim veure tots plegats. Val?
Repito mensaje: Anònim ha dit...
ResponEliminaPosiblemente la reunión la tengamos que hacer antes de que salga el sol, no fuera caso que… Y además sería cuestión de llevar agua vendita y ajos. ¿No os parece demasiada coincidencia en querer ir a Rumanía, después de nuestra fiesta de Vampiros? ¿Y que se haya releido Drácula? Llevad crucifijos a la reunión creedme, nunca está de más. Rafael.