L’Estatut y Alejandría.
Estos días, por prensa, radio o televisión no paran, ni pararán de surgir comentarios, sobre el resultado de la deliberación, por parte del Tribunal Constitucional, sobre el recurso presentado por el PP contra l’Estatut de Catalunya. Si leemos lo que dicen en la prensa española podrá verse claramente cuál es su posición sobre el tema. Nadie acepta que Catalunya tenga un Estatut como el que redactó y aprobó el Parlament, según el deseo del pueblo de Catalunya y que aprobó las Cortes. Se demuestra una vez más, lo poco inteligente que es el pueblo español y los jueces del Tribunal, al no aceptarlo tal cual se redactó.
Estos días estoy inmerso en la lectura de “Justine” de Lawrence Durrell, y que forma parte de la tetralogía denominada “El Cuarteto de Alejandría”.
¿Y qué tiene que ver l’Estatut, con “Justine” y Alejandría, os preguntaréis? Paso a responder a esta pregunta: En “Justine”, uno de los personajes, Balthazar, en una reunión de la Cábala dice: “Las grandes religiones no hacen más que establecer una larga lista de prohibiciones. Pero las prohibiciones crean el deseo que pretenden curar. En nuestra Cábala decimos: cede al deseo, pero refinándolo, con el fin de que la plenitud del hombre pueda equipararse a la plenitud del universo”.
Coincidió pues, con los días en los que el Tribunal Constitucional dio a conocer su veredicto, y me dije: “Son jueces poco inteligentes”, con su decisión corta de miras, quizás consigan lo que tanto se ha ansiado y que muchos indecisos no se atrevían a pronunciarse: ¡La INDEPENDENCIA!
Nos han dado un argumento contundente que puede facilitarnos la unidad de un deseo tantas veces soñado. Con su listado de prohibiciones crean el deseo de lo que pretenden prohibir. Si es así ¡Aleluya! Lo están consiguiendo. De momento, todos los partidos democráticos catalanes, excepto los del PP y Ciutadans, como era de suponer, se están uniendo (finalmente hay algo que les une), y se marchará el día 10 de julio hacia una Catalunya libre. Ojalá que fuera del desprecio que siempre ha sentido el estado español hacia nosotros. He tenido pues, una satisfacción añadida, a la lectura de “El Cuarteto de Alejandría”.
Rafel Rodríguez-Bella 1 de juliol de 2010
Estos días, por prensa, radio o televisión no paran, ni pararán de surgir comentarios, sobre el resultado de la deliberación, por parte del Tribunal Constitucional, sobre el recurso presentado por el PP contra l’Estatut de Catalunya. Si leemos lo que dicen en la prensa española podrá verse claramente cuál es su posición sobre el tema. Nadie acepta que Catalunya tenga un Estatut como el que redactó y aprobó el Parlament, según el deseo del pueblo de Catalunya y que aprobó las Cortes. Se demuestra una vez más, lo poco inteligente que es el pueblo español y los jueces del Tribunal, al no aceptarlo tal cual se redactó.
Estos días estoy inmerso en la lectura de “Justine” de Lawrence Durrell, y que forma parte de la tetralogía denominada “El Cuarteto de Alejandría”.
¿Y qué tiene que ver l’Estatut, con “Justine” y Alejandría, os preguntaréis? Paso a responder a esta pregunta: En “Justine”, uno de los personajes, Balthazar, en una reunión de la Cábala dice: “Las grandes religiones no hacen más que establecer una larga lista de prohibiciones. Pero las prohibiciones crean el deseo que pretenden curar. En nuestra Cábala decimos: cede al deseo, pero refinándolo, con el fin de que la plenitud del hombre pueda equipararse a la plenitud del universo”.
Coincidió pues, con los días en los que el Tribunal Constitucional dio a conocer su veredicto, y me dije: “Son jueces poco inteligentes”, con su decisión corta de miras, quizás consigan lo que tanto se ha ansiado y que muchos indecisos no se atrevían a pronunciarse: ¡La INDEPENDENCIA!
Nos han dado un argumento contundente que puede facilitarnos la unidad de un deseo tantas veces soñado. Con su listado de prohibiciones crean el deseo de lo que pretenden prohibir. Si es así ¡Aleluya! Lo están consiguiendo. De momento, todos los partidos democráticos catalanes, excepto los del PP y Ciutadans, como era de suponer, se están uniendo (finalmente hay algo que les une), y se marchará el día 10 de julio hacia una Catalunya libre. Ojalá que fuera del desprecio que siempre ha sentido el estado español hacia nosotros. He tenido pues, una satisfacción añadida, a la lectura de “El Cuarteto de Alejandría”.
Rafel Rodríguez-Bella 1 de juliol de 2010
Veig que no pares de llegir. Jo ja tinc la senyera amb un pal llarg preparada per la mani. Hi anireu sols o en familia? seria bo fer un grup.
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